Líquido de frenos: ¿Por qué es fundamental para el sistema de frenos del coche?

 
Los discos, las pinzas, las pastillas y la bomba de freno son los cuatro puntos cardinales del sistema de frenos, pero su funcionamiento depende del líquido de frenos, un líquido que trasmite la fuerza ejercida sobre el pedal del freno por el conductor al sistema.
 

Líquido de frenos: características y tipos

 
El líquido de frenos se caracteriza principalmente por su incompresibilidad, pero existen otros dos parámetros importantes que caracterizan los distintos tipos de líquidos de frenos: el punto de ebullición y la viscosidad.
  • Los coches modernos utilizan principalmente líquidos de frenos a base de glicol, que se identifican por la sigla DOT (Department of Transportation). Los utilizados con mayor frecuencia están identificados con las siglas DOT3, DOT4 y DOT5.1 que corresponden a los estándares mínimos que se han de cumplir en cuanto a punto de ebullición y viscosidad.
  • Algunos vehículos con sistema de frenos y embrague centralizado utilizan un líquido de frenos mineral, llamado LHM. 
 
Los líquidos DOT y LHM no se deben mezclar nunca entre sí.
 
Gama de líquidos de freno identificados por la sigla DOT (Department of Transport) y LHM, es decir, de base mineral
 

Temperatura de funcionamiento y bloqueo de vapor

 
El sistema de frenos y el líquido de frenos pueden trabajar a distintas temperaturas y, en condiciones extremas, el líquido de frenos puede alcanzar una temperatura de 200 °C. 
Cuando la temperatura de funcionamiento supera el punto de ebullición del líquido, se forman burbujas de vapor que anulan la incompresibilidad del líquido, un fenómeno llamado bloqueo de vapor que provoca un aumento del tiempo de frenada. Se trata de un fenómeno que se genera debido a la absorción de humedad desde el exterior a través de los poros de los tubos y que provoca la formación de burbujas de vapor antes de que se alcance el punto de ebullición original indicado en el envase.
 

Viscosidad y sistemas electrónicos del sistema de frenos

 
La viscosidad del líquido de frenos es otro requisito importante para el funcionamiento del sistema de frenos, sobre todo en los vehículos modernos con sistemas antibloqueo de frenos (ABS) y sistemas electrónicos de control de la tracción y la estabilidad (ESP).
El líquido circula a través de los mecanismos de control (normalmente a través de válvulas con pasos muy reducidos) y es indispensable que sea muy fluido para garantizar una transmisión precisa e inmediata.
Además, un líquido de frenos eficaz debe asegurar el funcionamiento correcto del sistema de frenos incluso en condiciones climáticas muy exigentes y, por ello, la viscosidad es fundamental para evitar una respuesta lenta.
 
Otras características importantes del líquido de frenos son la protección contra la corrosión, la capacidad de lubricación, la compatibilidad con los elastómeros y la óptima estabilidad térmica.
El líquido de frenos se debe controlar respetando los intervalos indicados por el fabricante y cambiar cuando es necesario. Esta es una de las condiciones para garantizar el correcto mantenimiento del sistema de frenos y mejorar la seguridad de tu vehículo.

¿Tienes alguna otra pregunta?

Contacta con el equipo de asistencia técnica de Brembo. Nuestros técnicos te responderán lo antes posible.
Volver al índice
Estudios
Leer el siguiente artículo
Kit de reparación para pinzas de freno
Política de privacidad">